Localidad perfecta para desayunar antes de una ruta de sol y playas
Esta ruta parte de la localidad costera de Gran Tarajal, uno de los principales puntos residenciales del municipio de Tuineje. Su céntrica playa de un kilómetro y arena negra, su paseo costero, sus dos puertos, sus múltiples bares y restaurantes, sobre todo en la avenida Paco Hierro, sus numerosos comercios y el sol mañanero la convierten en perfecta para desayunar junto al mar, océano que no se parará de disfrutar durante el trayecto restante. Por si se quiere agotar más tiempo, un pequeño enlace a la derecha a la salida del pueblo permite acceder, en apenas cinco minutos, a la pequeña población de Las Playitas, con su irresistible aire pesquero, su campo de golf cercano y sus bares ideales también para avituallarse antes de tanta fina arena rubia, lagos naturales, playas infinitas, paisajes desérticos y sol, mucho sol.
Playa de arena negra con varios restaurantes idóneos para desayunar
En la isla más plana de Canarias, lo lógico es que abunden las rectas y eso es lo que ofrece casi continuamente Fuerteventura. Por ello, resulta difícil perderse por cualquier ruta que se organice en esta isla. Para seguir esta de la muy playera comarca sur, solo hay que subir desde Gran Tarajal, llegar al cruce con la carretera general que baja a la península de Jandía y coger a la izquierda. La primera parada recomendada se sitúa en Tarajalejo, localidad costera cuya playa contrasta con las que siguen desde aquí y hasta Morro Jable por su arena negra.
Como Gran Tarajal, aunque con unas dimensiones mucho menores, Tarajalejo presenta vrias zonas residenciales, alojamientos y comercios. Los bares y restaurantes a pie de playa resultan idóneos para desayunar si antes no se ha hecho, aunque también está la opción de un baño y hasta el alquiler de algún kayak, aunque, claro, el tiempo apremia.
Comienza el infinito espectáculo de mar y arena, de azul y amarillo
Lo más espectacular aún está por llegar, pero queda poco. Desde Tarajalejo, la carretera casi roza el Atlántico y ofrece vistas cada vez más inspiradoras. En pocos minutos, y por rectas prolongadas, el vehículo se adentra en la península de Jandía y crece la sensación de desierto rociado de mar; también crece la de paraíso de playas infinitas. Tras pasar por el núcleo de La Lajita, con playa, campo de fútbol y zona residencial, se suceden las playas: la de La Lajita, La Jaqueta, Matas Blancas… Aunque lo mejor sigue esperando. Se llega así al núcleo de costa Calma, uno de los lugares más turísticos de la isla, con numerosos hoteles y otros alojamientos junto a su playa de unos dos kilómetros de largo.
No obstante, y si lo que se busca es naturaleza pura que mezcle el Atlántico y la interminable arena rubia, el éxtasis visual viene justo desde aquí hacia el sur. La playa de Sotavento es un mito del nudismo, la libertad, el windsurf y los amantes de caminar y caminar hasta perderse, con salomónicos baños de vez en cuando. Con mar vacía, las enormes lagunas que se forman son ideales para bañarse con los niños o simplemente disfrutar de un espectáculo en el que prima el amarillo y el azul, la inmensidad oceánica y la sensación de que los desiertos sí tienen final feliz, y acuoso. Demasiados atributos como para no parar continuamente el coche en los distintos sitios que permite la carretera o en las vías que más se acercan al litoral.
Se siente el mar como si la carretera fuera la orilla donde rompen las olas. Ezquizo es otra localidad turística con una interminable playa que sigue hasta el final del trayecto, en Morro Jable. Tanto si se ha comido antes como si no, Esquinzo y núcleos cercanos como Piedra Solana y Solana Matorral ofertan un amplio número de restaurantes, si bien su fuerte será siempre su escaparate costero: esas playas inolvidables que obligan casi sin remedio a seguir parando el coche, echarse al sol y bañarse en un apetecible Atlántico.
Puerto con playa y parada perfecta para comer y disfrutar del atardecer
La ruta termina en Morro Jable, localidad en la que destaca el puerto que enlaza con Gran Canaria. Además, su enorme playa del Matorral, que le da continuidad a las que bajan desde Costa Calma y Esquinzo, también resulta mu apetitosa si los baños precedentes aún no han saciado las ganas de sal, sol y paz. Los numeroso comercios, los restaurantes y bares aumentan los motivos para quedarse un buen rato a comer, echarse una copa y disfrutar del atardecer y las puestas de sol, que suelen ser simplemente espectaculares.
El faro de Morro Jable destaca en una localidad tan turística como el resto de esta parte de la Península de Jandía. Una “pata” de Fuerteventura, por su forma geográfica que reconcilia con la naturaleza si realmente se busca sol, playa, libertad y desconexión. La ruta más playera de las Islas Canarias no defrauda si ésas son las preferencias.
- Never leave waste of any type lying around, including cigarette butts. Leftover food leads to a proliferation of rats and wild cats, which pose a serious threat to the fauna.
- Use the waste- paper baskets and, insofar as possible, separate and place your recycling waste in the appropriate containers.
- Do not throw any waste or other objects into the sea.
- Respect the animals. Do not bother them or feed them. If you see an injured specimen, you can call the emergency number: 112. Do not pick flowers or plants.
- Do not pick up or take away stones or any other item from the natural environment. And do not move them to pile them up into sadly famous 'towers'.
- In natural spaces and at viewpoints, do not leave the trail or the spaces designated for people to be in.
- Respect and look after the area's historic and cultural heritage, along with the public furniture and items for visitors, such as information panels or telescopes and binoculars.
- Drive carefully and responsibly.